Palabras de Estela Castronuovo

¿La realidad o la fantasía?
¿La materia o el espíritu?
¿La exterioridad o la interioridad?
¿La mujer real o la mujer soñada?
A este dilema eterno de la humanidad se enfrenta Pedro, impulsado por una amarga insatisfacción. Dilema que, por otra parte, estuvo en la base de la renovación del teatro en las primeras décadas del siglo XX.
Pedro sabe que, al transgredir el umbral entre lo real y lo fantasmagórico, pondrá en jaque su existencia entera. A pesar de eso, lo hace, trágicamente.
Eso es lo que esperamos del teatro: que nos ponga en jaque, a nosotros y nuestro mundo cotidiano. Vamos a buscar al teatro "la materia de los sueños", según las palabras del inmenso William Shakespeare.
Patricio López Tobares y sus actores nos ofrecen una experiencia de este calibre, entre Arlt, Dostoiewsky, lo grotesco, el carnaval.
También él está traspasando una frontera, entre el final de una carrera y el inicio de su vida artística y profesional.
A quien fue destacado alumno durante tres años, le deseo la mejor suerte en esta nueva etapa. Y que jamás renuncie a sus sueños.

Lic. Estela Castronuovo


* La licenciada Estela Castronuovo es docente en la Escuela Metropolitana de Arte Dramático y en el IUNA. También es una reconocida Investigadora Teatral. Ha publicado diversos ensayos abarcando múltiples facetas del Teatro y la Construcción del Personaje.

UN GRAN EQUIPO...

DANIELA MARTIN: Dueña de una sensibilidad exquisita, Daniela llena de magia cada prenda que los personajes llevan en el escenario. Les da vida. Formada en el Instituto de Bellas Artes Beato Angélico, en el Profesorado en Artes Visuales, y en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colon, en el área de: “Técnicas de Realización Escenográfica”.

MATIAS TOZZOLA: Músico, Compositor, Concertista. Matías a recorrido, a pesar de su corta edad, un camino musical lleno de variantes y reconocimientos. Egresado del Conservatorio Juan Manuel de Falla, ahonda su sensibilidad alternando la composición con la ejecución, y hasta dándose el gusto de poder actuar sobre el escenario. La presencia escénica va de la mano de un talento inigualable como músico.

PATRICIO LÓPEZ TOBARES: Egresado de la Carrera de Puesta en Escena de la Escuela Metropolitana de Arte Dramático. Está ligado a la actividad cultural desde 1984. Es dramaturgo. Díscipulo de Ricardo Halac, egresado del seminario Argentores. Estudió Dirección Teatral con Wagner Mautone, Nestor Romero, Carlos Thiel, Paco Gimenez. Es el autor de "Pasión Bohemia", musical que dirigió Valeria Lynch. Trabajó junto a Julio Baccaro, Valeria Lynch, Pepe Cibrián, Sandra Ballesteros, Guillermo Fernández, Antonio Grimau, entre otros. Está trajando con la obra de Roberto Arlt desde 2007 y profundizándola hacia el futuro.

* Modelos * Inspiraciones * Referencias *

EL TEATRO FANTASTICO Y CEREMONIA MANTICA (Gastón Breyer) La "Fantasmática" es la irrupción al mundo cotidiano de lo extraño, inexplicable, sin causa ni razón, sin ley, ni estabilidad, sin sentido claro. La literatura del claroscuro, de lo sobrenatural, latente en todas las culturas. Después el ceremonial de la "mántica", la irrupción, en la cotideaneidad de lo sagrado, como lo místico, esotérico, espiritual, del alta formalidad ceremonial. Frecuentemente la divisoria no es clara, lo terrible invade lo sublime, el rigor de las más bestiales mistificaciones encubre y enloda lo más puro. Pero esos deben ser los riesgos.
MELODRAMA Obra teatral dramática en la que se resaltan los pasajes sentimentales mediante la incorporación de la música instrumental. El aspecto sentimental, patético, lacrimógeno, se exagera con la intención de provocar emociones en el público.
EXPRESIONISMO TEATRAL (Jorge Dubatti) Poética teatral que trabaja con la objetivación escénica de los contenidos de la conciencia (anímicos, emocionales, imaginarios, memorialistas, oníricos, psicológicos, patológicos, etc.) y, por extensión, con la objetivación escénica de la visión subjetiva. Es clave el término, "expresión", en el sentido de exteriorización, de movimiento que va del interior al exterior del sujeto.

Roberto Arlt, fabricante de fantasmas...

A Roberto Arlt (1900-1942) se le reprochó en ocasiones su torpeza escritural, su estilo grosero y con incorrecciones. Bueno, él, más cercano al grupo socialmente comprometido de Boedo que a las filigranas esteticistas y nacionalistas de Florida, puede que diera pie a esos reproches, aunque también puede –de hecho es lo más probable– que lo hiciera adrede. Y es que tales torpezas no implicaban un desconocimiento de la literatura, como algunos quisieron insinuar construyendo un falso silogismo. Antes al contrario, un drama como El fabricante de fantasmas, con menciones a Dostoievski, un diálogo de altura con Pirandello y una reflexión profunda sobre el personaje literario y dramático, demuestra una sabiduría razonada de lo literario más que admirable, con una atención a lo universal de la literatura, y no precisamente a las sagas islandesas.


El fabricante de fantasmas es el dramaturgo, pero también el hombre. El hombre que inventa personajes siniestros, de los que caminan por veredas mal iluminadas para ocultar sus deformidades físicas, símbolos grotescos de sus deformidades interiores, y que luego ha de sufrir a esas obras imperfectas de su imaginación recordándole los crímenes que ha cometido y resucitándole las culpas olvidadas con freudiano esfuerzo. En esta pieza fascinante, que junta la realidad cotidiana con la fantasía onírica y carnavalesca, una cosa clara debe quedar al escritor: no es gratuito jugar con los personajes que surgen de la mente de uno, pues es la propia mente la que se encuentra reflejada en esos personajes.

De nuevo la tensión entre realidad y ficción, de nuevo el teatro dentro del teatro, la reflexión literaria. Roberto Arlt escribe teatro para hacer pensar al escritor, al letra herido, al estudioso o el apasionado de la literatura. Y también para dar que pensar al hombre en general, al que lanza preguntas sin esbozar la respuesta u ofrece respuestas para caer en la pregunta. El compromiso de Arlt en su literatura no es social, ni político; tampoco es exactamente moral. Es un compromiso antropológico. Nos sondea certeramente con sus obras y ante eso no cabe hacer ningún reproche.

Roberto Arlt habla sobre su obra "El Fabricante de Fantasmas"

"Declaraciones de Roberto Arlt el día antes del estreno de "El Fabricante de Fantasmas" el 7 de octubre de 1936:

"El asunto del drama: un hombre asesina a su esposa, ignorando los procesos subterráneos que provoca esa terrible y oscura fuerza denominada Remordimiento. Pero pronto los remordimientos van a buscar al criminal y bajo la forma de fantasmas lo atacan, lo persiguen, lo torturan y acosan, hasta obligarlo, después de una refinada tortura, a matarse del mismo modo que asesinó a su mujer.(Nota de Patricio: en esta versión 2009 se ha modificado ligeramente el final para mantener el suspenso del espectador).
Posiblemente, algún crítico excesivamente avisado situe mi creación dentro de la técnica pirandelliana (hoy se abusa del término); yo creo que nace de la lectura de Flaubert, en su novela Las Tentaciones de San Antonio y en Thais de Anatole France.
Los espantables personajes que animan el drama, el Jorobado, el Verdugo, la Ciega, el Leproso, la Coja, aparte de que en germen se encuentran en mis novelas "Los siete locos" y "El Jorobadito", son una reminiscencia de mi recorrido por los museos españoles. Goya, Durero y Brueghel el viejo, quienes con sus farsas de la Locura y de la Muerte reactivaron en mi sentido teatral la afición a lo maravilloso que hoy, insisto, nuevamente se atribuye con excesiva ligereza a la influencia de Pirandello, como si no existieran los previos antecedentes de la actuación de la fantasmagoría en Calderón de la Barca, Shakespeare y Goethe.

Si alguien me preguntara porqué le he dado una representación física tan espantable a los remordimientos de un criminal, debo contestar que es porque el Remordimiento fue conceptuado, antaño, por los teólogos y hoy por los psicolanalistas, como uno de los más enérgicos elementos que provocan la descomposición psíquica del sujeto arrastrándolo a la locura y al suicidio.

Palabras del Director

* Del programa de mano del estreno:

Es muy difícil poder poner en palabras semejante emoción. Este no es un estreno más. El final de una etapa y el principio de otra. Un rito de paso simultáneo que es la concreción de un sueño personal que se unió a un sueño colectivo.
El Fabricante de Fantasmas simboliza y representa mucho: el amor a Arlt, el final de una carrera maravillosa, el principio de un camino genial, y el compartir con un equipo increíble. No hace falta agregar mucho más, fue una experiencia llena de vida, aprendizaje, alegrías, algunas tristezas, pero plena de teatro y arte.
Sólo queda agradecer, de corazón, con el alma.
Agradecer a todos mis profesores que marcaron de alguna forma mi camino académico.
A mis Maestros Delasalleta, Pavelik, Castro y Cano, aprendí a ser un Director con todas las letras junto a ellos.
A mi papá Raúl López, por su apoyo, sus palabras.
Agradecer a mi equipo: Jorge, Jesi, Fede, Tadeo, Fabi, Diego, Matute, Dany, los mejores artistas, bellísimas personas. Soy un director orgulloso. De ellos aprendo todos los días. Vamos juntos hacia el nacimiento de nuestra Compañía de Repertorio.
Y con todo mi amor a mi mamá, Sarah Susana Tobares, que con su apoyo, moral, económico, su educación, su amor, permitieron que yo pudiese avanzar en esta carrera

*ESTRENO*

La primer versión de El Fabricante de Fantasmas se realizó en 2009 cómo Trabajo Final Académico de mi carrera de Director en la Escuela Metropolitana de Arte Dramático. Se ensayó, con supervisión académica de mis profesores de la materia troncal (Roberto Castro y Luis Cano) de marzo a noviembre de 2009. El estreno fue el 12 de noviembre, realizándose cuatro funciones en la sede EMAD de Jufré 141, con una impresionante repercusión. El elenco de esa versión estaba compuesto por Jorge Castro Silva, Jesi González Ajón, Federico Saslavsky, Fabiana Hereñú, Diego Petrone y Matías Tozzola, siendo el equipo creativo el mismo de la versión 2010. Va mi agradecimiento al elenco que plantó la semilla fundamental de una historia que recién comienza.